miércoles, 25 de noviembre de 2009

" Dale Alegría a mi Corazón"








" Dale Alegría a mi Corazón" In Progress







viernes, 20 de noviembre de 2009

Inauguración Muestra Jardín Mágico


Mariano Lastiri - Maca Parot - Carolina Espinel - Mara Majul- Nico Stella- Diego Santos - Martín Narvaja




Carolina Espinel - Sofía Pombar


Marisa Dominguez y varios mas...


Enrique Lastiri y varios mas ...


Carolina Espinel



Carolina Espinel


Carolina Espinel


Carolina Espinel Obras



Carolina Espinel Obras



Carolina Espinel Obras


Carolina Espinel Obras


Carolina Espinel Obras



Carolina Espinel Obras

lunes, 16 de noviembre de 2009

Sobran Alegrías




"Sobran Alegrías"
Acrílico sobre tela
30 x 30 cm.
2009
Carolina Espinel

Alegría del Hogar en Blanco

Alegría del Hogar
Acrílico sobre tela
80 x 100cm.
2009
Carolina Espinel

Jardín Mágico




De todos los asuntos humanos, no hay quizás ninguno más universal que la búsqueda de la felicidad. Chesterton notó que el hecho de existir es tan prodigioso que ninguna desventura debería privarnos de una feliz gratitud. Para aquellos que no disfrutan de esta gracia inmediata, el consejo es simple: inscribirse, encontrarse, entregarse a una instancia mayor. En ello, y quizás sólo en ello, coinciden Epicuro y Spinoza, Hegel y Hume. Pocos han sabido retratar como el terrible Kafka la pesadilla que es la vida del individuo expulsado de lo eterno, habitante de un cosmos indiferente.
Superadas las obvias coincidencias, Carolina Espinel y Sofía Pombar recorren jardines de traza diversa. En los Sobrantes de Alegría de Carolina las formas se rebelan a toda sistematización, a todo límite; los colores invaden el bastidor y amenazan las paredes con la fuerza vital de lo natural. Reflejo del modo en que son concebidas, sucesión de impresiones sin intento de racionalización, generan la ilusión de que la obra se constituye al mismo tiempo que es observada. De allí la expresión viva de las alegrías, efervescentes, voluptuosas, inacabadas, inacabables. Como ocurre con las obras de la naturaleza, su plenitud no es signo de lo concluido sino de generación constante. La presencia humana es, si acaso tiene lugar, posterior. Es una naturaleza ajena a todo concepto.
La creación de Sofía es de naturaleza contraria: un distanciamiento de la impresión, una reconstrucción posterior devenida en evocación sistemática, en rito. Los rasgos humanos y su aspecto simbólico aparecen integrados en una trama en la cual lo personal e individual se revela aparente. Eneas es para ella el ser particular que al mismo tiempo es todos los hombres para no ser ninguno. Como es esencial a toda devoción, como en un mantra, lo único y personal de un instante se vuelve abstracto a causa de repetición hasta devenir finalmente en algo accesorio dentro de una totalidad en la que lo único que perdura, lo único que significa, es lo universal del orden mismo. La presencia humana es su condición; su naturaleza, la disolución de los conceptos.
Una y otra oponen al hombre dos caminos hacia felicidad: por un lado, el deleite inmediato y concreto, la saturación sensual de lo infinito; por otro, el orden implacable y abstracto que disuelve la conciencia del tiempo. Es en esta oposición frontal que establecen su diálogo. Ambas ejecutan minuciosas un mismo propósito: percibir a la naturaleza desde un punto de vista eterno, que es acaso aquel desde el cual ella se ve a sí misma. Quizás, si lográramos ver de esa manera, hallaríamos que ambas perspectivas no son otra cosa que manifestaciones parciales de una unidad profunda e inagotable.


Martín Narvaja


Mariano Lastiri



miércoles, 4 de noviembre de 2009

Sobritas...

"Sobrantes de Alegría"
20 x 20 cm.
Acrílico sobre tela
2009
Carolina Espinel
" Sobrantes de Alegría"
20 x 20 cm.
Acrílico sobre tela
2009
Carolina Espinel

"Sobrantes de Alegría"
20 x 20 cm.
Acrílico sobre tela
2009
Carolina Espinel
"Sobrantes de Alegría"
20 x 20 cm.
Acrílico sobre tela
2009
Carolina Espinel